El desarrollo científico de la última década en medicina preventiva a hecho que varias modalidades y nuevas alternativas de atención médica se hayan modificado o instalado. En términos prácticos muchas de ellas han tenido una directa participación del Laboratorio bioquímico, como es el caso del cuidado de la embarazada y del recién nacido. Prueba de ello es la disminución de los índices de mortalidad materno- infantil.
En apoyo a un buen examen clínico en la primera visita y controles periódicos y estratégicos durante el embarazo, el laboratorio puede mejorar las expectativas de una evolución favorable del mismo, un parto más seguro y una mejor salud del recién nacido.
Ya son de rutina algunos estudios para descartar problemas de incompatibilidad o de enfermedades metabólicas del recién nacido, que permiten realizar correcciones o reparaciones en los primeros días de vida, acciones que serían inútiles aplicarlas cuando haya pasado ese período crítico. Por otra parte mucho se ha avanzado en la prevención de la trasmisión vertical de infecciones, ya sea congénitas o a través del canal del parto.
Con tales fines, es importante que desde el punto de vista del laboratorio bioquímico se difundan y practiquen ensayos que resultan aportes recientes, y otros no tanto, dentro de los estudios de laboratorio en los diversos períodos del embarazo y en el recién nacido.
A continuación, se realiza una revisión de los mismos.
CONTROL DE LA EMBARAZADA
Primera visita médica:
Examen clínico que incluya las infecciones de trasmisión sexual (ITS).
Estudios generales de laboratorio recomendados
Primer trimestre
Hemograma con plaquetas, glucemia, TSH, orina, grupo y factor RH (si es RH negativo, prueba de Coombs).
Segundo trimestre
Hemograma con plaquetas, glucemia pre y post prandial, orina; si es RH negativo, prueba de Coombs.
Tercer trimestre
Hemograma con plaquetas, glucemia, orina; si es RH negativo, prueba de Coombs.
Estudios infectológicos
VDRL (si es positiva FTA abs), Anticuerpo (Ac.) anti-rubeola (si es positiva IgM específica), Ac. anti-Chagas, HIV, HBV, Ac. anti-toxoplasmosis (si es positiva IgM específica u otra muestra a los 15 días). Urocultivo
22 a 24 semanas:
Ac. anti-toxoplasmosis si la primera visita resultó negativa, Urocultivo
31 a 32 semanas:
Examen clínico que incluya las infecciones de trasmisión sexual (ITS)
HBV, HIV, VDRL, Ac. anti-toxoplasmosis si las anteriores resultaron negativas, Urocultivo
A partir de la semana 34:
Hisopado vaginal y anal buscando Streptococcus agalactiae beta hemolítico grupo B, Urocultivo.
CONTROL DEL RECIEN NACIDO
Ac. anti-toxoplasmosis, Ac. anti-rubeola, Ac. anti-CMV, Ac. anti-Herpes simplex, Ac. anti- VIH, VDRL.
Grupo y factor RH, TSH, fenilalanina, tripsina, 17 hidroxi progesterona, biotinidasa, galactosemia.
Bibliografía
– Schwarcz. Obstetricia. Ed. Ateneo, 6º de. Buenos Aires 2005
– González Merlo J. Obstetricia. Ed. Elsevier. Madrid 2006.
– Nazer Herrera J. Neonatología. Ed. Universitaria. ISBN 956-111-645-6. Santiago 2003
– Notario R. Microbiología para el médico. UNR Ed. 2005, ( Ed. 2013 en prensa). Rosario. ISBN 950-673-508-5
– Ruiz Reyes G, Ruiz Argüelles A. Fundamentos de Interpretación clínica de los exámenes de laboratorio. 2ª ed. Ed Panamericana. Buenos Aires, 2010
– http://www.msal.gov.ar/plan-reduccion-mortalidad/ y http://www.msal.gov.ar/inc/
Para mayor información o consultas:
Sección: Microbiología
Dra. Noemí Borda, Dr. César Yené, Dr. Ricardo Giordano
Tel 4499444 Internos: 228, 260 y 167