Como todos los años desde el 2002 y por una iniciativa de la Federación Mundial del Corazón con el apoyo de la Organización Mundial de la Salud y de la Organización Panamericana de la Salud, hoy se celebra el Día Mundial del Corazón.
Este año, el tema propuesto por la Federación Mundial del Corazón es la “creación de entornos saludables para el corazón” de manera de promover que los lugares en donde vivimos, trabajamos y nos desarrollamos, no aumenten el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares sino que favorezcan y faciliten la adquisición de hábitos y estilo de vida saludables.
Los objetivos de la celebración de este día son: dar a conocer masivamente al público general las enfermedades cardiovasculares, su prevención, control y tratamiento y los métodos o comportamientos necesarios para reducir al mínimo los factores de riesgo buscando que se priorice tener estilos de vida más saludables.
¿Qué son las enfermedades cardiovasculares (ECV)?
Las enfermedades cardiovasculares son un conjunto de trastornos del corazón y de los vasos sanguíneos, que incluyen desde hipertensión arterial (presión alta), cardiopatía coronaria (infarto de miocardio-angina de pecho), enfermedad cerebrovascular (apoplejía-ACV), enfermedad vascular periférica, insuficiencia cardíaca, cardiopatía reumática, cardiopatía congénita y miocardiopatías.
En la Argentina, donde se estima que se producen alrededor de 35.000 infartos cardíacos al año, las enfermedades cardiovasculares constituyen la primera causa de muerte después de los 40 años. A nivel mundial cada año se producen 17,3 millones de fallecimientos relacionados con problemas cardiovasculares.
¿Como se pueden prevenir las ECV?
La prevención es fundamental ya que buena parte de los factores de riesgo que las provocan son prevenibles y modificables en nuestra vida diaria. Está demostrado que el cese del consumo de tabaco, la reducción de la sal de la dieta, el consumo de frutas y hortalizas, la actividad física regular y la evitación del consumo nocivo de alcohol reducen el riesgo de ECV. Por otro lado, puede ser necesario prescribir un tratamiento farmacológico para la diabetes, la hipertensión o la hiperlipidemia, con el fin de reducir el riesgo cardiovascular y prevenir ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
Algunos consejos para prevenirlas:
Afortunadamente, existen muchas cosas que se pueden hacer para reducir las probabilidades de tener una enfermedad del corazón, entre ellas:
– Llevar una dieta equilibrada y saludable: seguir una dieta variada que sea baja en contenido graso de origen animal, aumentar el consumo de alimentos antioxidantes y ricos en vitaminas como las frutas y verduras, así como otros alimentos ricos en ácidos grasos Omega 3. Evitar el exceso de azúcar.
– Mantener un peso saludable: las personas con sobrepeso y obesidad son más vulnerables ante el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. De ahí la importancia de cuidar la alimentación y mantener un control regular de nuestro peso.
– Hidratarse adecuadamente: el agua, además de hidratarnos, colabora con diferentes procesos como la digestión y la traspiración. Además, al realizar actividad física, nos permite rendir más y evitar los calambres. Otros de los beneficios de su consumo, es que nos ayuda a regularizar la temperatura de nuestro cuerpo. Es importante no esperar a tener sed para tomar agua. La mejor bebida para hidratarse es el agua.
– Reducir el consumo de sal: el consumo excesivo y prolongado de sodio aumenta el riesgo de hipertensión arterial, empeora los síntomas asociados a enfermedades del corazón, hepáticas y renales, y agrava cualquier disfunción del organismo en fumadores, diabéticos y obesos. Es fundamental moderar el consumo de sal, aún si se trata de personas sanas. El sodio está presente en la mayoría de los alimentos por eso se debe estar atento al contenido que indican las etiquetas de los alimentos y bebidas al momento de su compra.
– Ejercitarse regularmente: realizar actividad física de manera regular aumenta la esperanza de vida, ya que previene enfermedades crónicas como diabetes, enfermedades cardiovasculares y cáncer.
– Dejar de fumar.
– Conocer su presión arterial y mantenerla controlada.
– Hacerse pruebas para detectar diabetes y si la tiene, mantenerla bajo control.
– Revisar y mantener controlados sus niveles de colesterol, triglicéridos y glucosa.
– Disminuir el estrés.
Fuentes:
– Sociedad Argentina de Cardiología
www.sac.org.ar
– Federación Mundial del Corazón:
www.world-heart-federation.org
– OMS Enfermedades cardiovasculares
www.who.int
– OPS Enfermedades cardiovasculares
www.paho.org
-Medline plus
www.nlm.nih.gov