La Brucelosis es una enfermedad infectocontagiosa de curso crónico causada por microorganismos del género Brucella spp, que son un grupo de bacterias intracelulares, inmóviles y de crecimiento lento. Se reconocen distintas especies, algunas de ellas afectan a animales terrestres (B. abortus, B. melitensis, B. suis, B ovis, B. canis) y otras a animales marinos. Brucella abortus, Brucella melitensis, B. suis y B. canis son patógenos en humanos.
Se transmite de animales a las personas (la mayoría de las veces, a través de la leche, el queso y otros productos lácteos sin pasteurizar). Con menos frecuencia las bacterias que causan la brucelosis se propagan por el aire o por el contacto directo de animales infectados. Algunos de los síntomas de la brucelosis son fiebre, dolor en las articulaciones y fatiga. Por lo general, esta infección puede tratarse perfectamente con antibióticos. Sin embargo el tratamiento dura desde varias semanas hasta meses, y son frecuentes las recaídas.
La brucelosis puede afectar prácticamente a cualquier parte del cuerpo, incluidos el aparato reproductor (orquiepididimitis), hígado y bazo (inflamación e infección), corazón (endocarditis), artritis y el sistema nervioso central (meningitis y encefalitis), lo que refleja la importancia del diagnóstico diferencial en las áreas endémicas, aún si el cuadro clínico no es totalmente compatible.
Se considera caso confirmado de brucelosis a todo caso probable con confirmación por laboratorio de uno o más de los siguientes criterios:
• Estudios bacteriológicos positivos: aislamiento de Brucella spp. de muestras clínicas: hemocultivo, médulocultivo, biopsias, etc.
• Estudios serológicos positivos: aglutinación en tubo (Wright) y otras que permiten la detección de anticuerpos IgG específicos en el suero del paciente; Fijación de Complemento (FC), ELISA
• Presencia de nexo epidemiológico con un caso confirmado.
Un resultado negativo de las pruebas bacteriológicas no descarta la infección.
Un resultado negativo serológico en una sola muestra no descarta la infección.
Un resultado positivo de las pruebas serológicas puede indicar: infección activa, anticuerpos que persisten después de la recuperación, contacto accidental con el germen no necesariamente seguido de enfermedad o exposición a un microorganismo que presente reacción cruzada con Brucella spp. Es por eso que mientras el aislamiento bacteriológico tiene una sola interpretación, los resultados serológicos deben estudiarse en conjunto con los datos clínicos y epidemiológicos
Laboratorio CIBIC ofrece las siguientes determinaciones diagnósticas:
Prestaciones disponibles en Cibic:
Es importante comunicar al laboratorio de la sospecha de brucelosis para extender los tiempos de incubación habituales de los cultivos y la siembra en medios especiales para su recuperación.
Para conocer las condiciones del paciente, de almacenamiento y de envío de la muestra y otros datos sobre las prácticas consulte al manual de prestaciones y a la extranet.
Referencia
– Enfermedades infecciosas Brucelosis. Guía para el equipo de Salud. Diagnóstico de Brucelosis. Ministerio de Salud.
Para mayor información o consultas:
Sección: Microbiología
Bioq. Claudia Misto.
Tel: 0341-4722424. Int: 228/227
Sección: Producción bioquímica clínica
Bioq. M. Florencia Dengra. Tel: 0341-4722424. Int: 222/226
Bioq. Hernán Brescia Tel: 0341-4722424. Int: 215