El Virus del Papiloma Humano (VPH o HPV, según sus siglas en inglés) causa cerca de medio millón de muertes por año alrededor del mundo. Sin embargo, muchas personas no tienen conocimiento del VPH ni de las enfermedades que provoca.
Desde el año 2018, cada 4 de marzo se conmemora el Día Internacional de la Concientización del Virus del Papiloma Humano, como iniciativa de la Sociedad Internacional del Papilomavirus (IPVS), con el fin de abordar la extrema necesidad de crear conciencia sobre este virus y el daño que causa y remarcar la importancia del acceso a la vacunación y los testeos periódicos, teniendo en cuenta que la mayoría de los cánceres provocados por el VPH son prevenibles.
¿Qué es el virus del Papiloma Humano y como se transmite?
Los VPH son un grupo de virus que infectan la superficie de la piel y las mucosas como las áreas genitales, pero también boca, nariz y garganta.
El VPH se transmite de persona a persona por contacto piel a piel con una zona infectada y puede estar presente durante años sin causar ningún síntoma. Es la infección de transmisión sexual más común a nivel mundial. Se estima que 4 de cada 5 personas contraerán uno o varios tipos de VPH en algún momento de sus vidas.
Existen más de 150 tipos de virus, pero poco más de 40 afectan la zona genital. Pueden dividirse en dos grandes grupos según su riesgo de producir lesiones malignas: VPH de bajo riesgo oncogénico, generalmente asociado con lesiones benignas o de bajo grado y VPH de alto riesgo oncogénico asociados con lesiones malignas, formado por alrededor de 14 tipos (16, 18, 31, 33, 35, 39, 45, 51, 52, 56, 58, 59, 66, y 68)
¿Qué riesgos conlleva la infección por VPH?
En la mayoría de los casos, la infección por VPH no presenta síntomas evidentes y el sistema inmunológico la resuelve espontáneamente.
En general, los VPH de bajo riesgo producen lesiones benignas, como las verrugas, producidas en más del 90% por los genotipos de bajo riesgo oncogénico 6 y 11.
Los VPH de alto riesgo provocan alteraciones en las células que pueden generar lesiones precancerosas que con el tiempo pueden evolucionar a cáncer.
Existe una asociación de más del 99% entre el VPH de alto riesgo oncogénico y el cáncer de cuello de útero (CCU), siendo los tipos VPH 16 y 18 los responsables del 70% de los CCU. Pero, además, está asociado con otras neoplasias malignas como cáncer de vulva, vagina, ano, pene y orofaringe.
Aproximadamente el 10% de los casos no van a ser resueltos por el sistema inmune, volviéndose una infección persistente. Esta persistencia (5 a 10 años) lleva al desarrollo de lesiones que, si no son detectadas y tratadas a tiempo, pueden progresar a cáncer.
De acuerdo a estadísticas del Ministerio de Salud, en la Argentina, el CCU es el tercer tipo de tumor más frecuente en mujeres, y el cuarto que más muertes causa en esta población. Se estima que cada año 4.500 nuevas mu¬jeres son diagnosticadas y más de 2.100 fallecen a causa de esta enfermedad.
¿Cómo se puede diagnosticar la infección con VPH?
Existen tests moleculares basados en la amplificación por PCR que permiten detectar e identificar los distintos tipos de VPH.
Cibic Laboratorios cuenta con la plataforma Cobas® 5800 (Roche) mediante la cual se realiza el Test HPV Cobas® 5800 que detecta ADN de 14 tipos de VPH de alto riesgo. Identificando individualmente VPH16 y VPH18 junto con un pool de 12 genotipos de alto riesgo VPH AR (31, 33, 35, 39, 45, 51, 52, 56, 58, 59, 66 y 68). Este test fue aprobado por la FDA en 2011 para ser usado en conjunto con la citología, y en 2014 para tamizaje primario debido a su sensibilidad y reproducibilidad.
¿En qué casos se recomienda la realización de tests moleculares de HPV?
El test de VPH junto con la citología o prueba de Papanicolau (PAP) se utilizan en los programas de prevención del CCU los cuales revisten gran importancia al ser un cáncer altamente prevenible si se detecta en su estadio precanceroso.
Las pruebas de detección de VPH han demostrado ser más sensibles y efectivas en la detección precoz del CCU que el PAP y desde el año 2012 la OMS la recomienda para el rastreo primario del CCU. En Argentina, en 2015 se incorporó la prueba de VPH como tamizaje primario del CCU mediante la Resolución Ministerial 2381/2015. En 2022, el Ministerio de Salud y la Agencia de Control del Cáncer de la Provincia de Santa Fe, en su Programa de Prevención de Cáncer de Cuello de Útero, incorporó el test de VPH como estrategia de prevención temprana para mujeres entre 30 y 64 años.
El proceso de tamizaje varía según la edad y los recursos disponibles del sistema de salud. Actualmente existes dos metodologías utilizadas:
1) Citología la cual detecta cambios celulares o células anormales en el cuello uterino.
2) Test molecular de VPH que permite detectar la presencia de VPH de alto riesgo oncogénico.
La Nueva Guía 2022 sobre Prevención primaria y secundaria del CCU de la Sociedad Argentina de Patología del Tracto Genital Inferior y Colposcopía (SAPTGIyC) y de la Sociedad de Obstetricia y Ginecología de Buenos Aires (SOGIBA) recomienda:
– Hasta los 29 años inclusive, realizar citología (PAP), con un intervalo anual. Luego de 2 citologías negativas, puede realizarse a los 3 años.
– En ≥ 30 años, realizar tamizaje con prueba de VPH. Si la prueba es negativa, repetir a los 5 años y si es positiva, realizar triage con citología. No se recomienda en personas menores de 30 años ya que son muy frecuentes las infecciones transitorias por lo que la utilización de esta prueba puede llevar a sobrediagnóstico y sobretratamiento de infecciones que no desarrollarán lesiones neoplásicas.
Si bien el tamizaje de VPH es mejor para prevenir el CCU que la citología realizada sola, el test de VPH puede no estar disponible en todas partes, por lo que una prueba conjunta cada 5 años o una citología cada 3 años siguen siendo buenas opciones. Hay que remarcar la importancia de la realización rutinaria de las pruebas de detección de CCU, independientemente de cual sea.
¿Se puede prevenir la infección con el VPH?
Existen vacunas que pueden prevenir la infección con ciertos tipos de VPH, incluyendo los genotipos más frecuentes relacionados a cánceres, así como los genotipos vinculados a las verrugas anales y genitales.
La vacuna contra el VPH se incorporó al Calendario Nacional de Vacunación en el 2011, en el marco de la Estrategia Integral para la Prevención del CCU del Ministerio de Salud de la Nación, destinada a las mujeres de 11 años nacidas a partir del año 2000 y en el año 2017 se incorporó también para los niños de 11 años.
A partir del 1 de enero de 2024, en base a la evidencia científica, las recomendaciones internacionales y el análisis del grupo de trabajo de la Comisión Nacional de Inmunizaciones (CoNaIn), el Ministerio de Salud definió simplificar el esquema de vacunación contra VPH a una única dosis a los 11 años, en lugar de dos dosis separadas por seis meses. Se considerará esquema completo a todas las personas que tengan hasta 20 años que hayan recibido al menos una dosis de vacuna contra el HPV. En caso de inicio de esquema entre 21 y 26 años, corresponden dos dosis separadas por 6 meses. Como estrategia adicional se recomienda la vacunación contra VPH para personas que tengan entre 11 y 26 años y que pertenezcan a grupos de huéspedes con inmunocompromiso (VIH, trasplantados, lupus eritematoso sistémico, etc) con esquema de 3 dosis (0, 2 y 6 meses).
Si bien el uso de preservativo y barrera de látex en las relaciones sexuales no asegura la no transmisión de VPH ya que puede ubicarse en zonas de contacto que queden por fuera del método de barrera, se aconseja su uso para disminuir el riesgo de transmisión de VPH y para la prevención de ITS de manera general ya que las co-infecciones aumentan el riesgo de desarrollo de CCU.
Prestaciones disponibles en Cibic Laboratorios:
* El ensayo detecta los siguientes genotipos de HPV: 16, 18, y otros genotipos de HPV de alto riesgo. Nota: “Otros genotipos de HPV de alto riesgo” detecta uno o una combinación de los siguientes genotipos de HPV: 31, 33, 35, 39, 45, 51, 52, 56, 58, 59, 66 y 68.
** El ensayo detecta de manera individual los genotipos HPV 16 y HPV 18, un pool de 12 genotipos de HPV asociado a alto riesgo oncogénico compuesto por los siguientes genotipos de HPV: 31, 33, 35, 39, 45, 51, 52, 56, 58, 59, 66, y 68 y mediante una PCR complementaria se analiza la presencia de todos los genotipos HPV (PAN-HPV). Nota: en el caso de detectarse secuencia especifica de «otros HPV de alto riesgo», se detecta uno o una combinación de los siguientes genotipos: 31, 33, 35, 39, 45, 51, 52, 56, 58, 59, 66 y 68
Para conocer las condiciones del paciente, de almacenamiento y de envío de la muestra y otros datos sobre las prácticas consulte al manual de prestaciones y a la extranet.
Referencias:
– Estrategia mundial para acelerar la eliminación del cáncer del cuello uterino como problema de salud pública https://www.who.int/es/publications/i/item/9789240014107https://www.argentina.gob.ar/salud/vacunas/vph
– Recomendaciones del Programa Provincial de Prevención del Cáncer de Cuello Uterino sobre las pautas de tamizaje. https://www.santafe.gov.ar/index.php/web/content/download/244709/1287131/
– Wright T, et. al. (2015) Primary cervical cancer screening with human papillomavirus: end of study results from the ATHENA study using HPV as the first-line screening test. Gynecologic Oncology 136(2):189-97.
– Nueva Guía 2022. Prevención primaria y secundaria del cáncer cervicouterino. “Manejo del tamizaje anormal y de las lesiones histólogícas del cuello uterino” de la SAPTGIyC- SOGIBA.
https://www.sogiba.org.ar/index.php/publicaciones/notas-cientificas/797-nueva-guia-2022-prevencion-primaria-y-secundaria-del-cancer-cervicouterino-manejo-del-tamizaje-anormal-y-de-las-lesiones-histologicas-del-cuello-uterino
Para mayor información o consultas:
Sección: Biología Molecular
Dra. Mariela Sciara
Tel: 0341-4861600. Int:225